Tiempo de lectura: 2 minutos

Somos conscientes de que las tecnologías de la información y la comunicación, las TIC, han revolucionado la forma de relacionarnos y de hacer las cosas. En esta fase de explosión tecnológica, que se caracteriza por la instantaneidad de acceder a cualquier información desde cualquier medio, estamos dominados por la velocidad a la que podemos hacer las cosas.

Las organizaciones demandan, cada vez más, talento nuevo para incorporar en sus filas. Cada día nos enfrentamos a procesos de transformación digital que necesitan ser impulsados y soportados por profesionales con un nuevo tipo de competencias y conocimientos digitales. La aportación de valor no sólo es el conocimiento que un trabajador pueda aportar, sino cómo ser más eficiente en la captación de ese nuevo talento utilizando la tecnología como aliado.

Esta imperiosa necesidad está siendo cubierta, en gran parte, por una nueva generación que hace uso de la tecnología de manera habitual en su vida profesional y personal. Esta nueva generación se incorpora en las organizaciones con un cableado mental diferente que busca integrar su vida profesional en su vida personal.

En este nuevo ecosistema las reglas cambian y debemos adaptar nuestras técnicas de evaluación de talento a la nueva realidad. Te revelamos algunas claves para conseguirlo con éxito:

No podemos seguir evaluando a las nuevas generaciones con las herramientas y procesos que estábamos evaluando a sus predecesoras. Se impone una revolución en el assessment. Aquí te dejamos un video que ayudará a recapacitar sobre ello: